Afiche original de los setentas, promocionando un concierto del Grupo Naranja.
La relación de Martín con la música empieza a una edad muy temprana, cuando todavía era menor de edad. Su tío era Paco Amayo, por lo que no era raro ver a Martín en las instalaciones de MAG, presenciando los ensayos y grabaciones de las agrupaciones más exitosas del momento. Al ser un chico “de la casa”, le llega la oportunidad de participar en unos coros para La Sonora de Lucho Macedo y no desentona. Luego de recibirse de alférez en la Policía Nacional, Fernando Rubio –por entonces director artístico de MAG- le propone grabar con dicha disquera.
Así, Martín comienza la búsqueda de músicos y decide darse a sí mismo el nombre artístico de Martín López: en realidad se llama Pedro Gregorio López, pero dado que su madre era devota del santo Martín de Porres, decide tomar su nombre. Entre los músicos que formaron la base de esa primera agrupación llamada “Martín López y sus Estrellas” estuvieron Alberto Lazo en el teclado, Jesús Hu en las congas, Oscar Ramírez en la guitarra y Carlos Meneses en los timbales. Lo primero que grabaron fue un disco 45 RPM donde inclusive no contaban aún con Oscar Ramírez y la guitarra estuvo a cargo de Raúl Herrera de Los Belkings. Ya para el long play titulado “Cocinando” fueron apoyados por toda una constelación de estrellas de la disquera: Melcochita, Joe di Roma, Ñiko Estrada, Coco Lagos, Tito Chicoma, etc.
Luego de esta experiencia, a partir de 1973 Martín López conforma “Los Extraños”, llegando a grabar discos 45 RPM para IMSA, Infopesa e INDISA. El nombre surge a sugerencia de Carlos Meneses y además estuvieron acompañados de Dante Herrera (1era guitarra), Pancho Lema (tumba), Perilla (tres cubano) y Alfredo Salazar (bajo). De todos los integrantes cabe resaltar a Pancho Lema, que venía de trabajar con “Los Beta 5” y paralelamente hacía música con “Los Príncipes”.
No hay que olvidar que Martín seguía con su trabajo de policía. Por entonces teniente, fue destacado a Ñaña y conoce a Víctor Hugo Álvarez, a quien apoyaría en las voces para su grupo Los Bossa Nova 107 (más tarde Grupo Amistad). Además, Martín forma un pequeño sello discográfico propio llamado Din-Don, donde graba con “Los Extraños” pero bajo el nombre de “Armonía 6”.
La primera grabación del Grupo Naranja aparece en 1976, aunque no se trató del grupo de Martín, siendo la historia como sigue: “Los Ecos” de Beto Cuestas venían trabajando con FTA, aunque Beto tenía su propio sello discográfico (Caracol) en asociación con Víctor Cáceres. Resulta que FTA no acepta grabar un par de temas de “Los Ecos”, así que deciden sacarlos en un disco 45 RPM para el sello Caracol bajo el nombre de Grupo Naranja y cantando Guajiro Ortega.
En julio de ese mismo año, Víctor Cáceres le propone a Martín López empezar a grabar para Caracol, pero tomando el nombre del Grupo Naranja. Así nacen los primeros 45 RPM del Grupo Naranja que todos conocemos, con composiciones de Tito Caycho (entre ellas la famosa "Juanita linda") y la guitarra de Beto Cuestas. Meses más adelante, Víctor forma su propio sello discográfico llamado Poderoso, llevándose al ascendente Grupo Naranja como abanderado.
La conformación del Grupo Naranja es la misma de “Los Extraños”, salvo que sale Perilla y entran Javier Saaz en el bajo y Roberto Herrera en la segunda guitarra, para darle al grupo un aire más de cumbia peruana y menos de guaracha. En Poderoso plasman su único larga duración, además de algunos discos chicos.
En 1978, Javier Saaz tiene una disputa personal con Víctor Cáceres y éste le pide a Martín que lo separe del grupo. Sin embargo, Martín no acepta, lo cual también significó darle la espalda a Víctor y abandonar Poderoso. Pancho Lema, que era muy amigo de Víctor, decide quedarse en Poderoso y así nace el “Grupo Fiesta”, promocionado también en sus inicios por dicho sello.
Un hecho curioso de la época es que se solía armar grupos a manera de parodia, para tocar covers de canciones reconocidas. En este caso, apareció el "Grupo Toronja" realizando su propia versión de "Juanita linda" en la voz de Paco Zambrano.
Estando sin sello discográfico, Martín decide reactivar su propio sello para lanzar un 45 RPM y en 1979 son contratados por IEMPSA, donde el Grupo Naranja graba muchos discos chicos. Una vez más, no olvidemos que Martín continuaba con su labor de policía y sus continuas apariciones en el mundo de la farándula no eran bien vistas por la institución, mucho menos en una época de dictadura militar. Por estos motivos le dan de baja, aunque Martín logra reingresar a inicios de los ochentas pero con la promesa de alejarse de la música. Por ello acaba la aventura del Grupo Naranja en IEMPSA, sin darles la oportunidad de poder grabar otro larga duración.
Alejado de la música, Martín continúa como policía pero además comienza a estudiar derecho en la Universidad San Martín. Para 1987 termina la carrera y cumplidos sus años de servicio, solicita su baja de la Policía para volver a la música. Por ello Naranja vuelve a finales de los ochentas, pero ya los tiempos eran otros y la salsa sonaba muy fuerte. Un joven Koko Giles le da a Martín unos temas del Grupo Contraste de Colombia y así nacen unos nuevos discos 45 RPM del Grupo Naranja, nuevamente en IEMPSA pero ahora como salsa.
También en la misma dirección, Celia Hernández –directora artística de IEMPSA- le pide ayuda a Martín para lanzar algunos covers de la salsa más sonada del momento. Por ello Martín colabora en los coros para un disco con “Sabor Latino”, haciendo una versión de “La chica de Chicago”, lo cual sería la última grabación de Martín López en vinilo.
Lo que vino en adelante para el Grupo Naranja fueron algunos cd’s para Rosita Producciones en estas dos últimas décadas. Además en la primera mitad de los noventas Martín participaría en la producción “Bombazo peruano” grabada para Argentina, al estilo de la bailanta. Mientras que en la segunda mitad de ese década, Martín estaría ligado a Aguamarina (que no eran los mismos de Sechura) y aquella experiencia con la cumbia norteña lo lleva a formar “Onda Norteña con los Hermanos López”, también del mismo estilo.